domingo, 20 de julio de 2008

TROPA DE ÉLITE



SINOPSIS: Río de Janeiro, 1997. A Nascimento, capitán del BOPE (Batallón de Operaciones Especiales de la Policía), la tropa de élite de la Policía de Río, se le asigna el mando de uno de los grupos que tienen la misión de “pacificar” las favelas del cerro de Turano debido a la visita de Juan Pablo II, quien va a instalarse en una zona cercana. El capitán, bajo una presión constante, empieza a notar los efectos del estrés. Tiene que ejecutar las órdenes recibidas, mientras intenta encontrar un sustituto, ya que su mujer, Rosane, se encuentra en sus últimos días de embarazo y le pide constantemente que abandone la primera línea del Batallón. En estas condiciones, le llaman para otra emergencia más en una favela. Durante un tiroteo en una fiesta funk, Nascimento y los suyos tienen que salvar a dos aspirantes a oficiales de la policía: Neto y André Matias. Deseosos de entrar en acción e impresionados por la actuación de sus salvadores, los dos se presentan como candidatos al curso de formación del BOPE.
COMENTARIO: En demasiadas ocasiones los que escribimos de películas somos excesivamente benevolentes con el cine que nos llega desde las cinematografías periféricas. Ya sea por esnobismo, por "culturetarismo" (que no deja de ser un neologismo que define otra forma de esnobismo), por empatía o, simplemente, por esa extraña tendencia que tenemos los seres humanos a identificarnos con los que tienen menos posibilidades, solemos valorar con excesiva indulgencia film que provienen de Asia, África o Sudamerica. Lo que nos sucede es que en muchas ocasiones el árbol no nos deja ver el bosque y priorizamos determinadas temáticas de carácter social sobre la calidad cinematográfica; determinados ejercicios producto únicamente de la tradición cultural (como la forma de narrar de algunos directores iraníes o chinos) con innoivación y vanguardia cinematográfica. Los que me conocen saben que no estoy de acuerdo con ello. En estos países, como en Europa y Hollywood, se hace buen cine, películas irregulares y bodrios infumables. El cine no es una cuestión de nacionalidad sino de talento.
Digo todo esto a colación de la película brasileña Tropa de élite, un film que conquistó el último Oso de Oro en el Festival de Berlín y ha obtenido unas críticas espectaculares donde se ha estrenado.
Y que quieren que les diga: por una vez los premios y agasajos son absolutamente justos. Tropa de élite es un peliculón, una obra maestra que seguramente no recibirá la afluencia de público que merecería. La película narra la historia de unos policías que trabajan cada día en las favelas de Brasil, y lo hace cuidando al máximo la parte sociológica del relato, algo obvio, pero también profundizando en la psicología de unos personajes y demostrando que en este mundo no hay buenos ni malos; sólo personas que sobreviven o que siguen sus propios, y a veces equivocados, códigos éticos. Las dos horas de duración pasan como un suspiro y nos sumergen en una historia apasionante, impactante y llena de matices de todo tipo. Además, por si todo ello fuera poco, la pelí es entretenida, está filmada maravillosamente y es capaz de emocionarnos hasta en los más pequeños detalles.
Si este verano sólo tenéis la oportunidad de ir una vez al cine, esta ha de ser vuestra película: no os arrepentiréis.
LO MEJOR: Todo
LO PEOR: Nada
TRAILER

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